viernes, junio 29, 2007

"El filo de la hierba" de Harkaitz Cano

Es Harkaitz Cano un notable prestidigitador. El papel que lucía inocuamente blanco sobre la mesa pasa a proyectar, sostenido entre sus manos, mundos tan alternativos como aquel que precisamente existió solo en la pantalla de cine, el del encuentro entre el más grande cómico y el más genocida tirano de la primera mitad del siglo XX. A la sazón presentan sus fabulaciones mucho de la magia del celuloide: cada encadenado se abre a una catarata de asociaciones, cada fundido aboca a un estupor respetuoso y emocionado… Le sucede en más de una ocasión, no obstante, que las luces van a encenderse a mitad de la función. A diferencia de otros autores formados en la poesía, Cano exhibe un pulso firme cuando de lidiar con los pasajes líricos se trata, los contiene y ellos se lo agradecen volviéndose indispensables. Pero los juegos de espejos se resquebrajan en la que constituye su gran asignatura pendiente: el uso de los diálogos. Es así que sus criaturas avanzan e incluso vuelan sobre las calles de prosa que para ellas ha diseñado, pero se vuelven morosas cuando les toca por fin tomar la palabra. Nada hace más daño al truco que un súbito ralentí en su ejecución. La ilusión se deshilacha, intuimos una y otra vez el gesto que no debíamos, solo la aparición del conejo blanco de rigor puede ya consolarnos. La chistera narrativa de Cano, por suerte, es de lo más generosa. Subido a ella el autor se eleva por encima de la media, alcanza el nivel de Unai Elorriaga como punta de lanza de las letras vascas. Pero, más allá de sus premios, el aplauso no puede desembocar aún en ovación de gala.

(Esta reseña apareció en el número de junio de Qué Leer.)

Famous Last (but one) Words (117)

"Siento... [en efecto, pausa dramática] pasión por la letra escrita." - J.P.A., en uno de los recesos del congreso de jóvenes narradores de Sevilla, a un interlocutor joven y femenino pero decididamente no narrador (pues se abstuvo de contestarle con una colleja).

jueves, junio 28, 2007

sábado, junio 23, 2007

Varios posibles lemas para una sesión doble

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1. The Quiet / The Chumscrubber.
2. The Dark Side of Suburbia.
3. La noche de Camilla Belle.
4. (Suma y sigue)
The Quiet
+ Alpha Dog = The Chumscrubber.
5. (Parecidos razonables)
The Chumscrubber vs. Alpha Dog.
Etc, etc...

viernes, junio 22, 2007

Big in Italy!


Portada de la edición italiana del Grimpow de Rafael Ábalos.

Rosebud, Corleone, siempre nos quedará París...

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Estas son las mejores diez películas de la historia del séptimo arte (entendemos que norteamericano) según la décima encuesta al respecto realizada por el American Film Institute:

1. Citizen Kane de Orson Welles (1941).
2. The Godfather de Francis Ford Coppola (1972).
3. Casablanca de Michael Curtiz (1942).
4. Raging Bull de Martin Scorsese (1980).
5. Singing in the Rain de Stanley Donen y Gene Kelly (1952).
6. Gone With the Wind de Victor Fleming (1939).
7. Lawrence of Arabia de David Lean (1962).
8. Schindler's List de Steven Spielberg (1993).
9. Vertigo de Alfred Hitchcock (1958).
10. Wizard of Oz de Victor Fleming (1939).

De lo cual se deduce que Victor Fleming era muy bueno, ¿no?

miércoles, junio 20, 2007

Se suelen ir los mejores

Lesiones puntuales al margen, dos son las grandes diferencias entre el Barça glorioso y dobleteador de la temporada pasada y el Barça aturdido y desolado de la presente. La primera tiene perfil de abrelatas: no es en sus registros goleadores donde Eidur Gudjohnsen ha fracasado miserablemente, sino a la hora de crear espacios en ataque para un tridente obsesionado con recibir antes la pelota al pie que en profundidad, abonado a la genialidad desde lo estático antes que a la sorpresa desde lo dinámico. Jugar con Henrik Larsson, principal responsable de la Copa de Europa de París, era como comenzar una partida de damas con una ficha incrustada en la penúltima línea del tablero rival. Circunstancia que hubiera sido la mar de agradecer en encuentros tan trabados (y decisivos) como los de Yokohama y Anfield.

La segunda ausencia ha pasado bastante más desapercibida, pero no cabe menospreciar su influencia. Durante dos años, Henk ten Cate ejerció de intermediario entre Rijkaard y la plantilla, de modo tal que su marcha ha desnudado a un entrenador que no ha sabido (y al que además tampoco correspondía) apaciguar a ciertos pesos pesados del vestuario. Si Larsson abría sobre el césped, Ten Cate echaba la persiana desde el banquillo para evitar salidas de tono tan venenosas como las protagonizadas este año por Samuel Eto’o. Son detalles nimios los que a menudo dan al traste con las más perfectas maquinarias; de modo paralelo, quizá un par de retoques puntuales resultarían más efectivos que el rasgarse las vestiduras en que está incurriendo estos últimos días Joan Laporta.

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"Favourite Worst Nightmare" - Arctic Monkeys

Tras mucho bajar a la mina y alimentar con sus miembros los voraces telares de la revolución industrial, los niños y niñas de Gran Bretaña vieron cómo la época victoriana les daba por fin un respiro. Nada más acabada esta, por cierto, James Matthew Barrie legó al mundo un héroe literario hecho a su imagen y semejanza; un muchacho llamado Peter Pan que revoloteaba por la noche londinense a la busca de otros zagales que, como él, reivindicaran la infancia renunciando a toda responsabilidad y emigrando al País de Nunca Jamás. Los que así lo hacían se convertían en chicos perdidos, vivían entre hadas y piratas, acudían cada día de la semana a la única discoteca de aquella tierra peligrosa y extraordinaria para escuchar a una banda de Sheffield que respondía al nombre de Arctic Monkeys…

Hasta aquí la versión más o menos fantasiosa de la historia.

Sucede, no obstante, que tanto la discoteca como el resto del País de Nunca Jamás se hallaba en realidad bajo el control de una multinacional de la industria del espectáculo, empresa que se hacía de oro con las ventas en el mundo real de una banda promocionada como el no va más del éxito precoz, de las virtudes del acné cuando se aplica a disciplinas tan provenientes de las entrañas como la que consta de empuñar una guitarra y consagrar las cuerdas vocales al noble arte del gorgorito…

Hasta aquí la versión más o menos comercial de la historia.

Regresemos a la única discoteca del igualmente insólito País de Nunca Jamás, donde los monos árticos están a punto de presentar su ya segundo álbum en el plazo de dieciséis meses. Alex Turner y compañía han heredado, pues, el gesto laborioso de sus antepasados industriales. Conscientes de que las tácticas comerciales tácticas comerciales son, de que lo mejor de la adolescencia radica en ir dejándola atrás, han optado por la senda de la maduración. Porque es el orgullo intrínseco y no cualquier forma de presión externa lo que mantiene a la clase trabajadora al pie del cañón, los chavales se han dejado la piel concierto a concierto (el bajista Andy Nicholson cayó víctima del agotamiento y pidió la substitución por Nick O’Malley), han hecho sangrar las yemas de sus dedos al punto de convertir el inicial Brianstorm en una esplendorosa reformulación indie de las épicas bases de Iron Maiden. Dignos émulos de Wayne Rooney, saben cómo galopar y morder, pero han aprendido también a reducir las pulsaciones por aquello del contraste y la sorpresa: de ahí el virtuosismo que desprende If You Were There, Beware, tan espléndido a ratos como irregular en su conjunto. Teddy Picker, Fluorescent Adolescent y Old Yellow Bricks regurgitan tradición desde cada uno de sus acordes, mientras Balaclava y The Bad Thing beben aún de su propia ópera prima, clásico en toda regla del brit pop del último lustro. Estatus que no debería alcanzar esta pesadilla de notable ejecución pero no tan directa y favorita.

Y hasta aquí la versión más o menos musical de la historia.

(Esta reseña ha aparecido en el número de junio de Go Mag.)

lunes, junio 18, 2007

Manto de flores para ciclistas al choque

"La solución final" de Michael Chabon

Aunque se desenvuelve en alemán con el distraído aplomo de quien habla su idioma materno, el loro tiene toda la pinta de pertenecer a la (intuimos que más bien escocesa) especie de los MacGuffin. Su desaparición, por tanto, lo mismo que la consiguiente investigación a cargo de un legendario pero ya octogenario detective, tendrá mucho de cortina de humo: el que despiden los trenes-prisión que, cargados a reventar de deshechos humanos, avanzan impasibles camino de los campos de exterminio.

Es
Michael Chabon autor de esfuerzos descomunales, que tanto abandona el trayecto que tras 1.500 páginas no acierta a llegar a puerto (la legendaria Fountain City) como tira a la basura seiscientos fallidos folios para empezarlo todo de nuevo desde otra perspectiva (caso de la ahora muy exitosa en Estados Unidos The Yiddish Policemen’s Union). Pero menos tinta de impresora le suelen costar sus obras breves, títulos de voluntad no tan ambiciosa pero raramente menores en lo que a sus maneras literarias se refiere. Así, entre la juvenil Summerland y ese Gentlemen of the Road que publicó por entregas en The New York Times, La solución final trasciende la imprudencia de recuperar a un héroe clásico de la literatura gracias a un contexto (y un título) condenados a suscitar emociones de muy ancho calado. Chabon no solo se ha pegado el gustazo; lo ha trabajado de forma soberbia y ha sabido camuflar su carácter caprichoso apelando a la gran tragedia del siglo XX. Y de por medio, dando la vara, el dichoso loro.

(Esta reseña ha aparecido en el número de junio de Go Mag.)

domingo, junio 17, 2007

"Raines"


En ocasiones, el detective del LAPD Michael Raines ve muertos. Nosotros, en ocasiones, también. Los de Raines son los espectros de cada caso de homicidio que le toca investigar: más proyecciones de su imaginación que verdaderas apariciones de ultratumba, ejercen de convidados de piedra frente a sus cavilaciones. Los nuestros son actores otrora más o menos populares que regresan a la vida interpretativa al amparo de la televisión: el entrañable Tom Berenger de October Road, el espléndido Jeff Goldblum de Raines... Poco sería de esta serie sin sus fantasmas, los que dan prestancia a sus guiones y el que convierte a su protagonista en uno de los personajes más atractivos de la temporada catódica, a apenas un par de peldaños de Dexter. Bien por los unos y bien por el otro, pues. O, como dicen más allá del Río Grande: ¡Que vivan los muertos!

sábado, junio 16, 2007

Auster y Borges, Zambra y los árboles

"Y por eso arrendaste este lugar, dijo Bernardita, con amable ironía. Por amor a las coincidencias.

No, respondió Julián, avergonzado. Con fuerza, y hasta con cierta innecesaria violencia, repuso: Lo arrendé porque me pareció conveniente.

Sí, Julián, admítelo, dijo Sergio. Lo arrendaste porque has estado leyendo demasiadas novelas de Paul Auster.

(...) A raíz de aquella broma incómoda, Julián no volvió a leer novelas de Paul Auster. En más de una ocasión, incluso, desaconsejó su lectura, argumentando que, salvo por algunas páginas de La invención de la soledad, Auster era nada más que un Borges pasado por agua."

De La vida privada de los árboles, de Alejandro Zambra (Anagrama).

viernes, junio 15, 2007

Falling In Love Is Hard On The Knees (17)



Up Up Down Down Left Right Left Right B A Start (no en vano su último álbum, con diez temas y veinte minutos de duración, lleva por lema Worst Band Name Ever).

jueves, junio 14, 2007

España me duele, más si España canta

Hablando de rimas... Revelaba Jon Juaristi ayer, en las páginas de ABC, la letra que él y otros tres expertos (Luis Alberto de Cuenca, Abelardo Linares y Ramiro Fonte) propusieron al último Gobierno Aznar para darle vidilla y verbo al himno nacional. Antes de juzgarla en todo su esplendor, oh lector crepuscular, piensa que en ella se mezcla el referente homérico con el homenaje a Miguel Hernández, la cita de Espronceda y la mención al árbol de Gernika... Tras la lectura, eso sí, por motivos sin duda ajenos al buen hacer de los firmantes, la piel de un servidor sigue revelándose más propia de un can que de las siempre emotivas aves gallináceas...

HIMNO NACIONAL
Canta, España,
Y al viento de los pueblos lanza tu cantar:
Hora es de recordar
Que alas de lino
Te abrieron camino
De un confín al otro del inmenso mar.
Patria mía
Que guardas la alegría de la antigua edad:
Florezca en tu heredad,
Al sol de Europa
Alzada la copa,
El árbol sagrado de la Libertad.

Leído al pasar

"La belleza es tu cabeza." - Pintada en la confluencia de Massens con Travessera de Dalt.

miércoles, junio 13, 2007

Los Tres Colosos - Igor Mitoraj (2)


Dedicado a la Dra. Vainilla, que solicitaba más penes en la blogosfera...

"Because of the Times" - Kings of Leon

No resulta del todo descabellado aplicar a la producción discográfica de Kings of Leon los pasos en que se han estructurado tantos fines de semana: la noche del sábado te descubre vociferante, cerveza en ristre y una chica bajo cada brazo; el sol del domingo te despierta escoltado por un dolor de cabeza, si bien los recuerdos de la víspera pronto transforman la mueca en sonrisa canalla; esa misma tarde, acosado por la amenaza del lunes, caminas largamente entre promesas de enmienda y disquisiciones sobre el sentido de la vida… y multiplíquese todo ello cuando uno es hijo/sobrino de predicador. De otro modo, los Followill han abandonado el tono festivo y chulesco-sureño que les diera fama para entregarse a una serie de progresiones de percusión milimétrica, cortadas por riffs la mar de clásicos y encomendadas a la voz gimiente de Caleb, piezas de atmósfera crepuscular que no seducirán a las masas pero, más allá de alguna apropiación del universo Pixies y de la épica Lynyrd Skynyrd, deberían contribuir sobremanera al asentamiento de su estatus musical. A fe que la conciencia hace milagros, pues estos chavales no hacen más que crecer…

(Esta reseña ha aparecido en el número de junio de Go Mag.)

martes, junio 12, 2007

Treinta años, treinta portadas


Cuando menos, tal ha sido este mes la política seguida por la publicación británica Empire con respecto al aniversario de Star Wars. Sobre estas líneas, las cubiertas favoritas de este ladrador crepuscular... Y aquí, el enlace para quien desee hacerse con una suscripción a la revista y recibir por ello una figura conmemorativa de Lord Vader...

Ivanovic, el Terrible

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Este post está dedicado a Alejandro Montoya, que comprende al entrenador del Barça de baloncesto aún menos que este ladrador crepuscular.

(Fotografías de Jordi Cotrina para El Periódico de Catalunya.)

lunes, junio 11, 2007

"Tideland"

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He aquí la concepción que de la experiencia cinematográfica tiene Terry Gilliam: primero se delimita un terreno más o menos del tamaño de una pantalla de cine; a continuación se plantan en él varias minas antipersona; tanto el realizador como el espectador se colocan en uno de los extremos cortos; el primero se cubre los ojos con una venda, mientras que el segundo se promete no cerrarlos; y, al grito de "¡ya!", ambos salen en estampida... Sucede que el responsable de la función rara vez fallece en el intento (el famoso Quijote sería su principal cadáver); en su lugar, toda vez alcanzado el otro extremo del cuadrángulo, se lanza a pegar botes como un descerebrado. Y su compañero de carrera suele llegar unos instantes después, los dientes castañeteantes pero feliz en el fondo de haber sobrevivido a la prueba...

Ya en fecha tan lejana como 1981, con Los héroes del tiempo, había presentado Gilliam a un niño que, obviado por sus padres, era absorbido por un mundo de fantasía. Lo mismo que una década más tarde, en El Rey Pescador, sentó lo afilado de la línea que marca la frontera entre imaginación y locura. Este Tideland, que no en vano algo ha bebido del Big Fish de Tim Burton, representa la consumación realista (si bien sin abandonar el grotesco marca de la casa) de ambos temas. Pero, precisamente por constituirse en obra cumbre del gilliamismo, es sin duda la carrera de obstáculos-trampa que más espectadores se dejará por el camino...

Igor Mitoraj (1)

domingo, junio 10, 2007

Falling In Love Is Hard On The Knees (16)



Girls against boys. Nina Persson y secuaces contra Manic Street Preachers. De por medio, Your Love Alone Is Not Enough. Jura Manu González que este es uno de los temas del año. Servidor no puede más que ladrar afirmativamente...

sábado, junio 09, 2007

Oído al pasar

"¡Que el Señor te bendiga un montón!" - Sujeto soberanamente orondo a segundo sujeto ligeramente menos esférico en la confluencia de Travessera de Gràcia con Montmany.

jueves, junio 07, 2007

"Send Away the Tigers" - Manic Street Preachers

Desde su mismo bautismo discográfico, hace la friolera de quince años, Manic Street Preachers venían rozando la tarjeta roja de la sobrevaloración, propia y ajena. Todo en ellos resultaba hiperbólico: cada vez que abrían la boca vomitaban una declaración de principios, los riffs eran dramáticos o no eran, e incluso algo tan normal como la deserción de uno de sus miembros se convirtió en un asunto a vida o muerte. Parecía obvio que tarde o temprano el grupo habría de devorarse a sí mismo. No obstante, que Nicky Wire describiera la canción que presta título a su octavo álbum como un All You Need Is Love interpretado por Guns n’Roses abrió la puerta a la esperanza. Y, aunque Send Away the Tigers no es ningún festival del humor, por más que la proclama política siga al orden del día, los galeses parecen en efecto haber escapado a su propia sombra. El resultado son diez cortes grandilocuentes pero desprejuiciados, entretenidos en una primera escucha y mucho más en las sucesivas, un nuevo paso adelante en la trayectoria de una banda a la que hacer buen pop nunca le pareció suficiente.

(Esta reseña ha aparecido en el número de junio de Go Mag.)

Naturaleza no tan muerta

miércoles, junio 06, 2007

Famous Last (but one) Words (116)

"Te gastas una sintaxis bastante compleja. Pareces Conrad." - A.G.I., jefe de este ladrador crepuscular, a este redundante ladrador crepuscular, tras leer el último texto de este tautológico ladrador crepuscular.

Mujer de azul acechada

martes, junio 05, 2007

Tal que si esto fuera 1986...

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Vuelven Bon Jovi y Poison. Los unos con un álbum nashvilliano, los otros con un disco de versiones. Y mientras los primeros intentan no dar miedo, los segundos luchan por no dar pena. Ah, por qué no se habrán dado al trip hop todos ellos...

No fue la mejor de las centurias...

He aquí, por orden de aparición, los diez títulos que mejor reflejan lo que fue el siglo XX según votación de los lectores del británico rotativo The Guardian:

Heart of Darkness by Joseph Conrad
The Ragged Trousered Philanthropists by Robert Tressell
The Great Gatsby by F. Scott Fitzgerald
Brave New World by Aldous Huxley
The Grapes of Wrath by John Steinbeck
Nineteen Eighty-Four by George Orwell
The Diary of a Young Girl by Anne Frank
The Catcher in the Rye by J.D. Salinger
Catch-22 by Joseph Heller
Bridget Jones's Diary by Helen Fielding

(De lo que se deduce que el consciente colectivo de las islas no acierta a dar con una obra sobre los Swinging Sixties, ni sobre el advenimiento del punk, ni sobre los años de la Dama de Hierro, ni... ¿Acaso no pasarán a la posteridad Amis y McEwan, Ballard y Kureishi?)

Harte Okupa

lunes, junio 04, 2007

Del fútbol como elemento normalizador

"Hay muchas más cosas en Srebrenica que muerte. Cuando pienso en ello recuerdo cómo tratábamos de introducir algo de normalidad en el mundo lunático que nos rodeaba. Ésa es la razón por la que la gente utilizaba una dinamo para ver a Italia jugar contra Brasil en la final del mundial: querían ser normales, durante unos instantes, para vivir, para demostrarse que podían ser normales."

Emir Suljagic, uno de los escasos varones supervivientes del genocidio de Srebrenica y autor de Postales desde la tumba (Galaxia Gutenberg), en una entrevista publicada por Babelia el 02/06/07.

sábado, junio 02, 2007

"Vacancy"

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Una pareja tirando a desavenida. Un coche que se avería en medio de ninguna parte. Un motel de carretera que parece no haber recibido demasiadas visitas desde allá por 1967... Tales son los gastados mimbres con los que el californiano Nimród Antal ha tramado su primer film norteamericano, tras el estimable (y aún bastante más húngaro) Kontroll. Pero he aquí que su Vacancy acaba resultando uno de los thrillers más logrados de los últimos tiempos: bien interpretada (Luke Wilson y Kate Beckinsale, quién nos lo iba a decir...), la película evita las trampas que vienen hundiendo el género, se atreve a quedarse en los 80 minutos de duración y prescinde de cualquier salida de tono "creativa" para limitarse a contar bien, francamente bien, la historia que se trae entre manos. Sobre tan humilde pero encomiable ambición cimentó su carrera cierto orondo realizador británico de cuyo nombre, por una vez, por fin, podemos acordarnos...

viernes, junio 01, 2007

"October Road"

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No, really, you CAN'T go home...

(De no ser por el nulo carisma de su protagonista, Bryan Greenberg, y por los infantilismos de su guión podría resultar una serie de lo más estimable... La dirige, a todo ello, Gary "Things To Watch On Tv When You're Bored" Fleder. Y, entre sus secundarios, el gran -en efecto cada vez más inmenso- Tom Berenger.)

Por fin, quizá, el nuevo Jordan...

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"I'm banged up. I'm winded. I'm fatigued..." - LeBron James después de conseguir 48 puntos (incluidos los últimos 25 de su equipo) para vencer a Detroit a domicilio (107-109 tras dos prórrogas) y colocar el 3-2 a favor de Cleveland en las finales de la Conferencia Este.